1.- Siendo padre dormir es una utopía, cada vez más parecerás un extra de The Walking Dead.
2.- El termino multitarea nunca habrá tenido más significado para ti, ya que
hacer la comida, mientras das un biberón teniendo a tu hijo en brazos, será
algo completamente normal dentro de tus tareas diarias.
3.- Las manchas de vomito serán un complemento ideal de tu vestuario.
4.- Esos diez minutos de tu ducha diaria serán
el equivalente a un fin de semana en un Spa.
5.- Tienes super oído. Aunque estés en la otra
punta de la casa, con dos habitaciones de por
medioy las puertas cerradas, con la televisión
puesta, los perros jugando y los del gas
haciendo obrras en la calle, eres capaz de
escuchar los primeros signos de que tu retoño
se va a despertar.